Jorge Peña-. A menudo se anhela aquello que se ve con frecuencia y con lo que se está familiarizado, sin darse cuenta de que la verdadera vocación puede estar en lugares inesperados, esperando a ser descubierta. Este es el caso de la medinense Sofía García, una apasionada preparadora física que ha encontrado su lugar en el deporte adaptado. Su viaje profesional, que comenzó con una formación general en deporte, ha evolucionado hasta convertirse en una especialización profunda y significativa en la preparación física para atletas con discapacidad. Desde que comenzó su carrera en el ámbito del deporte, Sofía ha estado inmersa en un mundo de desafíos y logros, que la han llevado a convertirse, entre otras cosas, en una figura clave para el equipo español de baloncesto femenino en silla de ruedas.
Bueno lo primero, los Juegos Paralímpicos comienzan el 28 de agosto, ¿estáis ya concentradas?
Pues aún estamos en fase de preparación. Recientemente, el equipo tuvo una concentración en Alemania. Fue un período intenso de cinco días, donde nos enfrentamos en partidos contra la selección de Alemania, tanto por la mañana como por la tarde. La idea era medirnos contra un rival fuerte y ajustar nuestras tácticas en un entorno competitivo. Después de Alemania, nos concentraremos nuevamente en Madrid, en el Centro de Alto Rendimiento Joaquín Blume, a partir del 16 de agosto. Estaremos allí hasta el 22, trabajando en los últimos detalles y afianzando la química del equipo. El 23 de agosto volamos a París con el resto de la delegación española.
¿Cuándo debutáis en la competición?
Pues nosotras debutamos el 29 de agosto, que es el día después de la ceremonia de inauguración. Jugamos contra Gran Bretaña el 29, al día siguiente jugamos de nuevo y el 31 descansamos, para el 1 de septiembre jugar el último partido de la fase de grupos. A partir de ahí, el 3 de septiembre, entramos en la fase de eliminación.
¿Qué prioridades has observado durante la preparación en Alemania con las chicas?
La principal prioridad en la preparación ha sido mejorar la coordinación y el ritmo de juego del equipo. Dado que las jugadoras están repartidas por diferentes partes de España y no tienen la oportunidad de jugar juntas con frecuencia, es crucial que aprovechemos cada momento para integrarlas y que se familiaricen con el estilo de juego de cada una. En la liga nacional, aunque es mixta, las mujeres no tienen tantos minutos en cancha, lo que afecta a su ritmo y cohesión. Durante la concentración en Alemania, nos enfocamos en jugar partidos reales y en intensificar el trabajo en equipo. Además de los entrenamientos en cancha, realizamos sesiones cortas de gimnasio enfocadas en fuerza y explosividad. El objetivo es no solo mejorar el aspecto físico, sino también la comprensión táctica y la química entre las jugadoras, para que sepan cómo se mueve y juega cada una en diferentes situaciones.
¿Cómo has visto la presión y el ambiente del equipo durante este mes de concentración?
El ambiente dentro del equipo es muy positivo y motivador. A pesar de que algunas jugadoras pueden mostrar más tensión en situaciones de alta presión, hemos visto que el trabajo que han realizado previamente se refleja claramente en los entrenamientos y partidos. El seguimiento online que hacemos permite monitorear el progreso, pero la verdadera medida de su esfuerzo y dedicación se muestra cuando estamos todas juntas. La respuesta ha sido excelente, las jugadoras están demostrando un gran compromiso y una actitud seria hacia su preparación. La concentración ha ayudado a que se integren mejor y se adapten al estilo de juego del equipo.
¿Realizáis algún seguimiento específico con las jugadoras cuando están en sus respectivos equipos?
Sí, realizamos un seguimiento bastante detallado a nivel individual. Como preparadora física, me encargo de planificar y enviar una serie de ejercicios específicos a cada jugadora al inicio de cada semana. Luego, ellas me devuelven un feedback, lo que nos permite resolver dudas y ajustar los ejercicios según sus necesidades particulares. Este proceso de comunicación y adaptación es clave.
Has acudido ya a un Europeo, también a un Mundial, ¿qué expectativas tienes de cara a los Juegos?
Nuestras expectativas son bastante realistas. Entendemos que el deporte es impredecible y que todas las selecciones tienen las mismas posibilidades de ganar. Nuestra selección es joven y ha pasado por un importante proceso de renovación generacional, lo cual es emocionante pero también desafiante. Nos hemos enfrentado a selecciones muy fuertes en el Mundial y el Europeo y hemos demostrado un gran progreso, pero sabemos que hay equipos que están por encima de nosotros en términos de experiencia y recursos. Aun así, nuestro objetivo es posicionarnos lo más alto posible y luchar por una medalla. Vamos a dar lo mejor de nosotras en cada partido y enfrentar los desafíos con determinación.
Empezaste en noviembre de 2022, ¿cómo ha evolucionado tu rol y responsabilidad dentro del equipo desde entonces?
Mi rol ha evolucionado rápidamente desde que comencé. Empecé a trabajar con el seleccionador anterior, Adrián Yáñez, y luego el equipo fue dirigido por Frank, el actual seleccionador. Desde el inicio, Frank ha confiado plenamente en mi trabajo y me ha dado el espacio para tomar decisiones y adaptar los entrenamientos según sea necesario. Ha sido una colaboración muy positiva, donde he podido desarrollarme y ajustar mi enfoque en base a las necesidades del equipo. En estos meses, he ganado más confianza y he aprendido a conocer mejor a las jugadoras y sus necesidades individuales. Esto me ha permitido personalizar más los programas de entrenamiento y hacer ajustes según el rendimiento en cancha.
¿Qué retos has enfrentado al trabajar con el equipo?
Sí, algunos desafíos han surgido, especialmente con lesiones recurrentes en el tren superior. Hemos tenido que reajustar la forma de trabajar y modificar algunas mecánicas para evitar molestias. El mayor reto ha sido hacer que las jugadoras entiendan la importancia del trabajo físico para mejorar su rendimiento en la cancha.
¿Cómo crees que afecta la exposición de los Juegos Paralímpicos al deporte adaptado en comparación con otros eventos menos conocidos?
Los Juegos Paralímpicos son una vitrina muy importante para el deporte adaptado. A diferencia de eventos como el Mundial o el Europeo, los Juegos Paralímpicos reciben una cobertura mediática mucho más amplia, la visibilidad que obtienen en estos eventos ayuda a aumentar el conocimiento y el interés en deporte adaptado, mostrando que es tan exigente y valioso como cualquier otro.
Con respecto a tu trayectoria, ¿qué te llevó a especializarte en actividades físicas para la inclusión social de personas con discapacidad?
Mi interés en el deporte adaptado nació durante mis estudios. Al principio, no tenía mucha información. Sin embargo, cuando empecé a recibir más información y a hacer prácticas, especialmente en Coruña en el ámbito del deporte adaptado con personas con discapacidad intelectual, me di cuenta de que era un campo en el que me sentía muy a gusto. Me apasiona trabajar en este campo y ayudar a las personas a alcanzar su máximo potencial a través del deporte. A medida que ganaba experiencia, confirmé que este es el área en la que quiero seguir desarrollándome.
También estás en el Fundación Aliados y luego en la Federación de Deporte Adaptado de Castilla y León, ¿cómo compaginas todas estas responsabilidades?
Compaginar todas las actividades es complicado, pero lo gestiono ajustando horarios. Los entrenamientos de los equipos tienen horarios distintos, y trato de adaptar mi agenda para poder cumplir con todas mis responsabilidades sin afectar la calidad del trabajo. Es un proceso de ajuste continuo, pero la clave está en ser flexible y mantener una comunicación constante con todos los involucrados para asegurar que cada área reciba la atención que necesita.
Para finalizar, ¿hay algún proyecto o iniciativa específica que te gustaría desarrollar a corto o largo plazo?
A corto plazo, me han ofrecido la oportunidad de formar parte del cuerpo técnico de un equipo de baloncesto en Valladolid en Primera Nacional, que no es de deporte adaptado y eso para mí es un reto. Lo normal es empezar en un deporte normalizado y una vez te has especializado en él, das el salto al deporte adaptado. A largo plazo, estoy abierta a nuevas oportunidades que me permitan seguir creciendo profesionalmente, siempre que el horario me lo permita y por supuesto continuar aportando al deporte adaptado.
Enhorabuena y mucha suerte Sofía. Y al equipo ¡¡a ello!!
Perder como siempre los españoles
Pepero, como siempre ¡¡SUBNORMAL CRÓNICO!!
Realista