El formato del pódcast ha experimentado un crecimiento explosivo en los últimos años. Con más de 4 millones de pódcast en el mundo, este formato ha pasado de ser una novedad a convertirse en un fenómeno de masas. Hace apenas tres años, había solo 600.000 programas de este tipo, según datos de Demand Sage. La clave de su popularidad radica en su accesibilidad, la diversidad de temáticas y la posibilidad de consumirlo en cualquier momento y lugar.
El auge del pódcast impulsado por una generación joven
Efraín Foglia, profesor de Ciencias de la Información y Comunicación de la UOC, señala que el crecimiento del pódcast ha sido especialmente fuerte entre los menores de 25 años, quienes se sienten más atraídos por este formato que por la radio tradicional. En España, la producción de pódcast creció un 56% entre 2019 y 2020, un aumento que fue impulsado, en parte, por la pandemia.
Además, el pódcast permite explorar temas que la radio convencional rara vez toca. Según Foglia, «es un territorio fértil para nuevas gramáticas, nuevos experimentos y nuevos públicos», ofreciendo libertad creativa tanto para los creadores como para los oyentes.
Un fenómeno mediático y de negocio en auge
Influencers, periodistas, empresas y medios de comunicación han encontrado en el pódcast una plataforma ideal para llegar a nuevas audiencias. Con aproximadamente 70 millones de episodios disponibles, el pódcast ha dejado de ser solo un formato de entretenimiento para convertirse en una herramienta educativa y de divulgación científica. Se prevé que el mercado global de la industria del pódcast alcance los 30,03 mil millones de dólares a finales de 2024.
Sin embargo, Foglia advierte sobre la posible saturación de contenido y el riesgo de «infoxicación», aunque considera positivo el crecimiento de este formato.
El futuro del pódcast: video y nuevas oportunidades
A pesar de que el pódcast está profundamente vinculado al audio, algunos creadores están experimentando con el formato en video. Especialmente en entrevistas a figuras visualmente atractivas o relevantes, los oyentes también buscan ver al entrevistado. No obstante, Foglia destaca que esta tendencia es menos común entre los oyentes más jóvenes, que prefieren el contenido en audio.
La evolución del pódcast dependerá, en última instancia, de su economía y de los modelos de negocio que se establezcan. A día de hoy, el formato sigue creciendo y consolidándose como una versión contemporánea de la radio, con un abanico mucho más amplio de temas y formatos.
