Una nueva campaña de fraude ha sido detectada, suplantando a la Seguridad Social a través de mensajes SMS falsos. Esta estafa, conocida como smishing, insta a las víctimas a actualizar su tarjeta sanitaria mediante un enlace proporcionado en el mensaje. La intención detrás de esta táctica es robar información personal a través de un formulario fraudulento al que se accede desde dicho enlace.
Cómo reconocer el fraude
Los SMS fraudulentos suelen presentar errores ortográficos y gramaticales, lo que puede servir como una señal de alerta sobre su autenticidad. Estos mensajes afirman que es necesario actualizar la tarjeta sanitaria para evitar la pérdida de derechos asociados a la misma, lo cual es falso.
Medidas de seguridad
Si has recibido un SMS de este tipo, pero no has interactuado con el enlace ni proporcionado tus datos, es recomendable que borres el mensaje y bloquees al remitente para evitar futuros intentos de fraude.
Por otro lado, si has caído en la trampa y has completado el formulario, es fundamental que sigas estos pasos:
- Recopila evidencias del fraude por si necesitas presentar una denuncia ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
- Realiza egosurfing en los próximos meses para buscar si tus datos han sido publicados en la red. De ser necesario, solicita su eliminación invocando el derecho al olvido. Herramientas como Google Dorks pueden ser útiles para realizar búsquedas avanzadas.
- Vigila tu correo electrónico y otras cuentas para detectar cualquier actividad sospechosa y evitar posibles ataques de phishing.
- Contacta a la Seguridad Social para verificar la información y solicitar asistencia.
- Aprende a prevenir futuros fraudes siguiendo consejos de ciberseguridad.
Recomendaciones
Es crucial que los usuarios permanezcan alerta ante este tipo de engaños y no proporcionen información personal a través de enlaces sospechosos. La Seguridad Social nunca solicitará la actualización de datos sensibles por medio de SMS o correos electrónicos no solicitados.
Si se pulsa en la URL, esta redirigirá a la siguiente web maliciosa, la cual solicitará a través de un formulario la siguiente información: apellido, nombre, fecha de nacimiento y correo electrónico.
Una vez introducida dicha información, el ciberdelincuente tendrá a su disposición dichos datos. Estos datos puede ser utilizados cara cometer futuros ataques dirigidos a personas concretas y de esta forma engañar fácilmente a la víctima.
No se descarta que existan otras campañas similares también a través de correos electrónicos solicitando la misma información.