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Tal y como relató este semanario hace ya una semana: «Alarmados por la situación de la estructura que sostiene la campana mayor de la Colegiata de San Antolín de Medina del Campo, que está cediendo desde finales de septiembre», así mostraba en su perfil de Twitter su preocupación ‘Patrimonio Valladolid’, plataforma que pretende hacer prevalecer el patrimonio provincial, el pasado noviembre de 2023. Este mismo viernes, 23 de agosto, esta misma entidad volvió a pronunciarse: «Esperamos que en Medina del Campo hayan tomado todas las precauciones respecto a la subida de material para apuntalar la estructura del campanario de la Colegiata y que hayan calculado bien pesos y aguantes con el fin de evitar desgracias y que todo este documentado y con permisos y papeles en regla para evitar repetir errores como en la Iglesia de la Vera Cruz de Valladolid». Además, y junto a varias fotografías, hablan también de una caída de material durante unas labores realizadas en este enclavo, que habría afectado al tejado de la sacristía.
Pues bien, teniendo en cuenta que este enclave será el máximo protagonista del inicio de las fiestas patronales de San Antolín, Borja del Barrio, edil de Urbanismo, ya confirma que, «ante todo», la seguridad «está garantizada». De cara al mencionado despliegue de la bandera nacional que da inicio a las fiestas el día 1 de septiembre, del Barrio confirma que, alrededor del mes abril, se encargó elaborar un proyecto de mejora de esta estructura que actualmente está siendo estudiado por la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Castilla y León. «Cuando vimos que la estructura de madera del soporte de la campana se encontraba degradada y perdiendo capacidad portante, nos pusimos manos a la obra con este proyecto, no sin antes realizar un apeo provisional en la torre».
Con este escenario, y «teniendo a la vista la subida y despliegue de la bandera del próximo 1 de septiembre», en estos últimos días del mes de agosto se están realizando labores de apeo con más consistencia, «para evitar que pase cualquier cosa aunque, eso sí, se trata de medidas de seguridad a mayores; es más un tema de precaución que otra cosa, porque no tiene más trascendencia», advierte el edil. Con los puntales que ya estaban instalados desde aproximadamente el mes de marzo, se ha implementado este refuerzo con un castillete, incorporando mordazas «para que, por mucho que haya gente el día 1 de septiembre ahí arriba, no se puedan mover». En cuanto a las tejas dañadas de las que hablaba ‘Patrimonio Valladolid’, desde Urbanismo se confirma que se retejarán de manera inmediata.
