Esta mañana ha comenzado un campamento de verano único que promete revolucionar la forma en que se entiende y se aplica la tecnología en el mundo del vino. Del 1 al 5 de julio, la Bodega Rodríguez y Sanzo, ubicada en el municipio vallisoletano de Rueda, se convertirá en el epicentro de la innovación vitivinícola con un curso dedicado a la robótica en la viticultura.
El campamento, dirigido a mayores de 12 años, se desarrollará en un horario de 11 a 13 horas y tiene un coste simbólico de solo dos euros por persona. Esta iniciativa educativa no solo busca despertar el interés de los jóvenes en la tecnología y la agricultura, sino también mostrar las posibilidades que ofrece la robótica para mejorar los procesos vitivinícolas.
Las inscripciones pueden realizarse a través del teléfono proporcionado por los organizadores o personalmente en la calle Cervantes.