Ávila, 1 de julio de 2024 – La Unidad de Cría y Socialización Canina del Centro Militar de Cría Caballar de Ávila, ubicada en el Acuartelamiento El Pradillo, trabaja sin descanso desde las primeras horas del día. Cachorros menores de tres meses corretean y juegan bajo la atenta mirada de sus guías, en un ambiente de preparación constante para convertirse en perros de trabajo. Creada en 2011, esta unidad entrega una media de 80 perros al año a diversas entidades como las Fuerzas Armadas, la Guardia Civil, el CNI y la Policía Nacional.
Exposición y Adaptación a Estímulos
La socialización de estos cachorros es clave. Desde su nacimiento, se les expone a diversos estímulos para asegurar que puedan trabajar en cualquier circunstancia. «Un perro de trabajo no puede tener miedo a nada», afirma el teniente coronel José Curt García, jefe de la Unidad de Cría y Socialización Canina. Durante esta fase, los instintos de presa, caza y búsqueda se desarrollan a través de juegos y entrenamientos estructurados en cinco etapas: neonatal, guardería, iniciación, transición y potenciación.
Selección Cuidadosa de Progenitores
El proceso comienza con la cuidadosa selección de las madres. Actualmente, la unidad cuenta con 21 perras, con planes de aumentar a 24. Se prioriza la combinación de perras propias y adquiridas para evitar la consanguinidad. Los progenitores son elegidos por su pedigrí y características, asegurando que los cachorros hereden las mejores cualidades para el trabajo.
Formación Continua y Resultados
Los guías caninos, diez en total, reciben formación específica en diversas instituciones y son responsables de socializar a los cachorros, logrando un índice de éxito del 70%. Aquellos que no superan las pruebas finales son puestos en adopción. «La satisfacción es enorme cuando un perro que has ayudado a socializar logra un éxito en el campo», comenta el brigada Félix García.
Impacto y Futuro de la Unidad
Con trece años de trayectoria, la Unidad de Cría y Socialización Canina de Ávila se ha consolidado como un referente en la preparación de perros de trabajo. «Hemos demostrado que se puede socializar perros de manera efectiva, ofreciendo a nuestros compañeros los mejores perros para sus misiones», concluye con orgullo el teniente coronel Francisco Crespo.
