Redacción.-
UPA informa que han seguido entrando corderos de terceros países en
determinados mataderos de la región, por lo que reclamamos a los
ciudadanos de Castilla y León que de cara a Nochevieja y Año Nuevo se
informen de lo que compran, de su origen, y se decidan finalmente por la
calidad y trazabilidad de nuestros productos
UPA Castilla y León informa que desde el a última denuncia de nuestra organización
han seguido entrando corderos foráneos a determinados mataderos de la región.
Sabedores de que es una práctica legal, hacemos un llamamiento muy especial a los
consumidores de Castilla y León para que valoren la calidad, el origen y la trazabilidad
de los lechazos regionales a la hora de su consumo en fechas tan especiales y cercanas
como son Nochevieja y Año Nuevo.
Además, volvemos a hacer un llamamiento para que Consumo vigile el correcto
etiquetado de la carne en los puntos de venta y por lo tanto, entre otras cosas, de su
lugar de procedencia para que no se induzca a ningún tipo de engaño al consumidor.
En este sentido, UPA ha echado de menos por parte de la Junta de Castilla y León en
los últimos días un pronunciamiento firme sobre lo que piensa de la entrada masiva de
corderos foráneos en nuestra región cuando el lechazo de Castilla y León está pasando
una situación tan delicada y los ganaderos de la región se encuentran en muchos casos
en una situación de ruina económica.
UPA entiende que el apoyo de la Administración autonómica al lechazo de nuestra
comunidad autónoma no solo se demuestra haciéndose una foto institucional, sino
con apoyo real, firme y concreto de políticas mantenidas en el tiempo y destinadas a
los productores que en muchos casos no alcanzan el umbral de la rentabilidad y tienen
que abandonar su actividad.
Nuestra organización agraria hace un llamamiento a la sociedad castellanoleonesa
para que todos y cada uno de los ciudadanos de esta región hagamos activismo por
nuestro medio rural y por nuestro sector agroalimentario en estos próximos días.
Debemos dar ejemplo y demostrar que los castellanos y leoneses estamos
especialmente sensibilizados por consumir lo nuestro y por demostrar un espíritu
regional cuando además nuestros productos tienen los mayores parámetros de calidad
que ofrece el mercado.