Redacción.-
El Alcalde de Medina del Campo, Guzmán Gómez junto con el Concejal de Urbanismo, Borja del Barrio han mantenido una reunión con la Presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero, Cristina Danés de Castro y la Comisaria de Aguas, Diana Martín Sánchez para poder continuar con el proyecto europeo LIFE DUERO que afecta al río Zapardiel a su paso por la localidad.
La CHD organismo adscrito al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, presentó, hace dos años, el proyecto europeo LIFE DUERO, para impulsar una serie de medidas destinadas a cumplir los objetivos de la Directiva Marco del Agua en un territorio delimitado por las cuencas de los ríos Adaja, Zapardiel y Trabancos, y el acuífero de Medina del Campo, que se corresponde en su mayor parte con la zona sur de Valladolid y norte de Ávila.
La elección de la zona sur del Duero respondía a criterios de originalidad y
diferenciación frente a otros proyectos, ya que se trata de una zona de las
más secas de la Meseta, con ríos temporales ligados a las masas de agua
subterránea, que presentan problemas de sobreexplotación y contaminación
por la presión de la agricultura intensiva. De hecho, el espacio geográfico comprende una superficie de 3.700 km2 y unos ochenta términos municipales, y acoge en su subsuelo la masa de agua de Medina del Campo, para cuya óptima conservación se proponen medidas
innovadoras y sostenibles que pueden servir de modelo a otras cuencas
hidrográficas españolas.
Restauración de ecosistemas, depuradoras y riego eficiente
El proyecto contemplaba diferentes medidas concretas para cumplir los
objetivos de la Directiva Marco del Agua, entre las cuales cabe enumerar:
– Restauración de ecosistemas acuáticos, terrestres y humedales que dependen de la Red Natura 2000.
– Soluciones naturales para mitigar las consecuencias de posibles inundaciones, sobre todo en el entorno de Medina del Campo.
– Conservación del patrimonio hidráulico.
– Promoción del uso turístico y recreativo de las zonas húmedas.
– Desarrollo de cultivos con menor exigencia de agua.
– Utilización de sistemas eficientes de riego.
– Puesta en marcha de depuradoras de residuales.
– Restauración y acondicionamiento de riberas.
– Reducción de la contaminación difusa por nitratos.
– Divulgación de buenas prácticas agropecuarias.
La acción más compleja y de mayor calado era la eventual recuperación de
humedales asociados a los ríos Trabancos y Zapardiel, para la que se
plantea la derivación de agua excedentaria procedente del río Tormes a
través del azud de Riolobos (Salamanca) y, en años húmedos, desde el
embalse de Las Cogotas, en Ávila, mediante la utilización natural de la propia
red de ríos y arroyos.