Redacción.- La Policía Municipal de Medina del Campo en un comunicado hecho público en redes sociales, muestra su indignación por las pintadas acaecidas el fin de semana en las calles de la Villa:
«INDIGNACIÓN
La aparición de pintadas amenazantes e injuriosas en diversas calles de la villa, hacia un miembro de la Policía Local, al margen del hecho delictivo que pusiera suponer, ha desatado en las redes sociales una autentica batalla entre partidarios y detractores de la actuación cotidiana de la Policía Local.
Dichas pintadas aparecen en la madrugada del lunes, después de que durante las tardes del sábado y del domingo en diversos controles rutinarios, se hubieran producido varias incautaciones de marihuana, una intervención de armas blancas, e incluso, la detección y sanción de un conductor al volante bajo la influencia de drogas.
Pero al margen del hecho vandálico y su futura calificación jurídica que puedan llegar a tener las pintadas, lo más grave es cómo determinadas personas tratan de amparar y justificar las mismas alegando exceso de celo, extralimitación, abuso de autoridad y un sinfín de calificativos por parte de los miembros de la Policía Local afectados, sin darse cuenta de que si dichas actuaciones no se llevaran a cabo, en nuestras calles reinaría la ley del más fuerte; y camparían a sus anchas borrachos y drogadictos al volante con las consecuencias que se traducirían en forma de accidentes, heridos y fallecidos.
No podemos olvidar que las consecuencias de lo que algunos justifican como un par de cervezas de más, un cubata, un porro o cualquier tipo de droga al volante, se convierten en una merma de las condiciones psico-físicas para conducir y, directamente, en accidentes de tráfico con graves repercusiones sociales en forma de heridos y muertos.
Seamos sensatos y reflexionemos antes de opinar. El próximo accidente originado por causas del alcohol o las drogas nos puede afectar a cualquiera de nosotros o a nuestro entorno familiar. El siguiente kamizaze al volante que invada el sentido contrario puede venir de frente a nuestro coche o, por ejemplo, la siguiente llamada de un atropello originado por un borracho puede ser sobre un familiar. Pensemos si esto nos gustaría antes de opinar sin analizar la situación y sus consecuencias, y con nuestros comentarios amparar este tipo de conductas.»