Y llega el Nacional de Galgos
Que Medina del Campo es una localidad aficionada al mundo del galgo es indiscutible. Y que tiene experiencia acreditada en la organización de campeonatos relacionados con dicho mundo, a la vista ha estado en más de una ocasión; sin ir más lejos con motivo del quincuagésimo Campeonato Nacional de Galgos en Campo-Copa de Su Majestad el Rey.
Por tal motivo, este año tanto la Federación de Castilla y León como la Federación Nacional han elegido los correderos medinenses para la celebración de la “Copa de Castilla” y el septuagesimoquinto Campeonato Nacional de Galgos en Campo, que se desarrollarán, en el mes de enero, en esas fechas en las que la niebla se disipará para permitir ver y disfrutar, conforme avancen las mañanas, esas carreras en las que el galgo y la liebre, y la plástica que los mismos generan en sus movimientos, son protagonistas. Y es que, ya lo decían los antiguos, “Por San Antón, la niebla no llega a las dos”.
Pero al margen de la literatura, lo importante es el movimiento económico que, sin duda alguna, habrá de generar el flujo de los 50.000 asistentes a los campeonatos previstos. Por tal motivo, y de forma especial en los momentos en los que España está sumida en una crisis económica profunda, Medina y los medinenses deben estar contentos, dentro de las expectativas razonables y acordes a las circunstancias, por la inyección económica que puede suponer para la villa el contingente humano que se anuncia.
Naturalmente que el sector más beneficiado será el hotelero, ya que los concurrentes tendrán que permanecer en la villa durante varios días y, en consecuencia, en ella comerán, cenarán, se divertirán y pernoctarán. Y por supuesto, a la sombra de la hostelería, todo el Sector Terciario tendrá, al menos, la expectativa de venta y negocio que los medinenses mejor que nadie, por tradición comercial, sabrán aprovechar, generando incluso, aunque sea de forma temporal, algún que otro puesto de trabajo.
Ni qué decir tiene que las críticas fáciles al desarrollo del evento habrán de llegar, si es que no han llegado ya, con la pregunta fácil: ¿Y éso cuánto va a costarnos?. Pero la respuesta es fácil también: “Ni importa ni es tarde si la dicha es buena”, aunque poco, casi nada, costará al Ayuntamiento.
Por tal motivo llegan unos días en las que, guste o no guste el mundo del galgo, los medinenses deben defender el Campeonato Nacional como algo propio, todos a una, contagiando a los demás la ilusión colectiva de contar, al menos por unos días, con algo que a todos aglutine en un proyecto común, que no es otro que la defensa de los propios intereses.
LA VOZ DE MEDINA Y COMARCA