Editorial

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Ausencias injustificadas
La aprobación generalizada de un aumento de tasas, impuestos y precios públicos por el Plenario del Ayuntamiento es una responsabilidad que en primer lugar compete al Grupo de Gobierno que lo propuso y lo ratificó con la totalidad de sus diez votos.
No obstante, el sufragio emitido por el independiente Andrés Serrano, que en esta ocasión fue contrario a la subida generalizada de impuestos y tasas, habría sido útil al acumularse al voto de Izquierda Unida y a los del Partido Socialista Obrero Español, en el caso de haber asistido la totalidad de sus miembros, ya que al último Pleno no acudieron dos ediles de dicha formación de izquierdas.
De haber asistido, es presumible que Andrés Serrano hubiese mantenido también su postura, con lo cual, o se le habría situado entre la espada y la pared para saber cuáles eran realmente sus intenciones, o la subida de impuestos y tasas habría sido rechazada.
No parece de recibo que un partido de la solvencia y trayectoria de PSOE, con más de 100 años de experiencia a sus espaldas haya podido cometer este error, compartiendo así, le guste o no, la corresponsabilidad del aumento de impuestos y tasas.
Sería interesante saber qué circunstancias subyacen en las ausencias de dos ediles del PSOE al último Plenario. Uno de ellos podría no haber concurrido por razones estrictamente personales; pero el otro todo apunta a que no asistió al Pleno por diferencias con su propia formación. Y es que, quiérase o no, la división del PSOE local es ya patente, e incluso se presume que alguno de sus miembros habría iniciado ya unos tímidos trámites para la formación de un grupo mixto, al que se sumaría otro descontento más, que por tener experiencia acumulada de muchos años no concurrió al Plenario.
El Partido Socialista Obrero Español, que podría tener al alcance de la mano el Gobierno local en los próximos comicios, inicia así un camino sin rumbo que le avoca al fracaso electoral por lo injustificado de su proceder.
La ropa sucia debe lavarse en casa, sin que nadie se entere; pero el PSOE no lo está haciendo así, e incluso algunos miembros, no presentes en el Ayuntamiento, y que ya protagonizaron en épocas la pérdida del mismo por una forma de proceder similar, reaparecen de nuevo en las reuniones del propio partido sin que nadie sepa qué es lo que pretenden y a dónde van, a no ser que su forma de actuar sea intencionada y tenga como objetivo final dar “muerte política” a la actual portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Ana María Vázquez Vegas.
LA VOZ DE MEDINA Y COMARCA