Redacción.-
La gripe en Castilla y León se sitúa por encima del umbral epidemiológico, con una tasa de incidencia semanal de 256,44 casos por cada cien mil habitantes (tasa estandarizada de 277,2) y un nivel de intensidad media en la Comunidad, según el último informe de la Red Centinela Sanitaria correspondiente a la semana 3/2020 (del 13 al 20 de enero). Así han informado la consejera de Sanidad, Verónica Casado; la directora general de Salud Pública, Carmen Pacheco; y la gerente de Emergencias Sanitarias, Flor de Castro.
Dicho informe indica que la actividad gripal en Castilla y León tiene una mayor circulación de virus del tipo H1N1; la afectación es especialmente alta entre población infantil, con una tasa acumulada del 3 % entre los menores de cinco años.
Para la elaboración de este documento semanal, la Red ha contado con las declaraciones de 33 médicos y una población cubierta de 31.815 habitantes; el número de casos recogidos por la Red ha sido de 139 y de frotis procesados, 91, con 36 detecciones.
La situación autonómica es semejante a la del resto de España, en donde se presenta una mayor actividad en las autonomías del norte peninsular; por su parte, hasta la pasada semana, en el ámbito europeo, no se detectaba un aumento de la mortalidad fuera de lo esperado para la presente época del año.
Educación para la salud frente a la gripe
Mayor conocimiento individual, por medio de la educación y promoción de la salud, influye en la repercusión asistencial, propiciando un uso más racional de los servicios sanitarios por parte de los usuarios.
En este sentido, es conveniente recordar que la gripe en una enfermedad estacional de origen vírico, de transmisión respiratoria, que cursa con cuadros de gravedad variables, pero que en la mayoría de los pacientes presenta una evolución favorable en la que las recomendaciones a tener en cuenta son las ya conocidas, sin necesidad de acudir a un centro sanitario para su adopción.
Entre las actitudes más importantes para afrontar esta patología están guardar reposo; mantenerse hidratado; tomar analgésicos y antipiréticos para mejorar el malestar (los antibióticos no son efectivos ante virus, por lo que su uso únicamente ha de venir a través de una prescripción facultativa y en las condiciones que indique el médico); evitar el tabaco y el alcohol; no administrar ácido acetilsalicílico a niños ni a adolescentes; y, si no es necesario salir, permanecer en casa.
Además de estas medidas de autocuidado existen otras de responsabilidad individual y solidaridad social para evitar la transmisión gripal y la extensión de contagios; son estas: lavarse a menudo las manos; toser o estornudar tapándose la mano con el brazo o con el codo, nunca con las manos; usar pañuelos desechables y tirarlos tras su utilización; evitar, asimismo, el contacto por personas con gripe; y no acudir al trabajo, a la escuela o a lugares concurridos, tales como centros comerciales, hospitales, centros de salud y otros, en el caso de padecer la enfermedad.
El uso responsable de los servicios asistenciales es siempre necesario, pero más en fechas como las actuales, en las que el período epidémico gripal repercutirá en la demanda asistencial durante las próximas semanas.
Durante este período, tradicionalmente, los centros sanitarios y servicios de emergencias registran un incremento en la demanda vinculado a época invernal y a la epidemia estacional gripal, situación que conlleva, especialmente entre personas con patologías crónicas y pluripatológicas, un aumento en la descompensación y en el agravamiento de sus enfermedades y mayores tasas de hospitalización y morbilidad.
Siempre es conveniente recordar que el acceso a los servicios asistenciales de urgencias se justifica por la gravedad y la necesidad de la atención, de manera que, a través de los sistemas de triaje, se atenderá primero a pacientes que presenten situaciones sanitarias más complejas.
Cada caso presenta unas circunstancias particulares y si bien es cierto que, con carácter general, es conveniente seguir las recomendaciones sanitarias individuales y colectivas, hay que insistir en que, en pacientes con enfermedades previas crónicas, pluripatológicas o potencialmente graves, la gripe puede agravar su estado de salud.
Plan de contingencia
La Consejería de Sanidad mantiene operativo, como en años anteriores, el plan de contingencia frente a la gripe, tanto desde ámbito asistencial como de Salud Pública.
Para atender esta situación, últimos datos disponibles, referidos al pasado 19 de enero, indican que, en el conjunto del sistema sanitario público castellano y leonés, un total de 118 profesionales (seis médicos, 52 enfermeras, 47 técnicos en cuidados auxiliares de Enfermería y trece celadores) han reforzado las plantillas de los hospitales.
En cuanto al número de camas hospitalarias ampliadas en la actualidad es de 132.
Conviene recordar que, tradicionalmente y al igual que en el conjunto del Sistema Nacional de Salud, la incorporación paulatina de recursos asistenciales frente a la gripe se va modulando según las necesidades previstas por la evolución de la epidemia estacional gripal.
Esta adaptación de recursos se basa tanto en la reordenación y redistribución de plantillas habituales y en la contratación de personal.
Como datos asistenciales, a lo largo de la semana 3/2020, los datos de urgencias atendidas indican 357 atención más que en el mismo período del año anterior.
En cuanto al índice de ocupación hospitalaria, se sitúa en el 73,78 % de media en la red hospitalaria de Sacyl; el máximo registrado por ahora ha sido del 94,67 % en el Complejo Asistencial Universitario de Salamanca y el mínimo, del 58,82 % en el Hospital de Medina del Campo (Valladolid), el 17 de enero.
No ha habido, durante el último período de referencia, desprogramaciones quirúrgicas por aumento de demanda.
Por su parte, la vigilancia epidemiológica del virus gripal estacional se desarrolla a través de la Red Centinela Sanitaria castellana y leonesa, cuyo último informe, correspondiente a la semana 3/2020, está disponible a través del siguiente enlace a la web de Salud Castilla y León: Informe de la Red Centinela Sanitaria CyL sobre vigilancia epidemiológica de la gripe correspondiente a la semana 3/2020
El entramado de vigilancia epidemiológica cuenta con otra ‘pata’ a través de la monitorización de casos graves de gripe ingresados en el Complejo Asistencial Universitario de Burgos y en el Clínico vallisoletano, centros que forman parte del sistema nacional; en estos hospitales se controlan los virus de gripe que afectan a los pacientes ingresados con gravedad en su pronóstico, con el fin de determinar el tipo, consecuencias y circunstancias epidemiológicas en cada caso.
Por último, la gripe es una enfermedad de declaración obligatoria no urgente, por lo que los médicos que diagnostican casos en consulta incorporan información epidemiológica a través de los canales formalizados.
Asistencia telefónica gratuita
La Junta ha habilitado a través del teléfono 900 222 000 de información sanitaria en la Comunidad un sistema de atención a consultas ciudadanas sobre la gripe.
El 900 222 000, teléfono gratuito que depende directamente de la Gerencia Regional de Salud, tiene horario continuado a lo largo de todos los días de la semana.
A través de esta vía, operadores atienden las llamadas recibidas, para lo que disponen de formación y de cuestionarios específicos sobre la gripe, sintomatología, consejos y recomendaciones y otros aspectos relacionados con esta patología y su abordaje asistencial con las que responder a planteamientos informativos.
En el caso de que sea preciso, profesionales derivarán la llamada a médicos y enfermeras reguladores de la Gerencia de Emergencias de Sacyl adscritos al Sistema 1-1-2 de Castilla y León, para la posible activación de recursos asistenciales en cada situación concreta.
La habilitación de esta línea telefónica se plantea desde el objetivo de facilitar a los ciudadanos información útil que contribuya a su educación sanitaria frente a la gripe, de manera que puedan, desde más profundo conocimiento, adoptar las más adecuadas decisiones referidas tanto a la prevención de la enfermedad como a su abordaje personal en el caso de padecerla.
Ante situaciones de mayor demanda asistencial, antes de acudir a un centro asistencial, especialmente de urgencias, conviene realizar una valoración de esa necesidad, situación en la que la información y el asesoramiento de los profesionales que atienden el 900 222 000 sin duda mejorará la toma de decisiones de cada usuario en relación con la salud.