Editorial

2

Violencia de género
El próximo día 25 se conmemora el Día Internacional contra la Violencia de Género, en unos momentos en los que España se ve sumida en una nueva oleada de crímenes machistas.
Bien está conmemorar un día internacional para dejar constancia de un problema que existe y que es necesario erradicar; aunque las medidas para hacerlo deban ser mucho más concretas y eficaces de lo que pueda ser una mera conmemoración.
Está claro que las medidas contra la violencia de género han de tomarse con campañas de sensibilización y en la primera infancia de los jóvenes, introduciendo en el periodo educacional unas normas de conducta tendentes a formar a los futuros ciudadanos en dos terrenos distintos pero complementarios: la condena absoluta y el aislamiento de los maltratadores; y la concienciación de que la denuncia siempre es útil.
Ya en la adolescencia y juventud, donde parece que el problema de la violencia de género ha vuelto a calar, es menester dotar a los centros educativos del personal especializado en la lucha contra la violencia de género, sensibilizando al mismo tiempo a los ya casi ciudadanos de que ésta es, a todas luces, execrable.
En lo que respecta ya a la madurez del ciudadano, es el momento de que la sociedad elimine los viejos tabúes del machismo y las mujeres pierdan cualquier tipo de miedo, al margen de lo que puedan creer que piensan la sociedad, para denunciar.
Pero no todo son denuncias, ya que aquella mujer que se vea afectada por maltratos en el ámbito familiar ha de sentirse respaldada por el conjunto de la sociedad y auxiliada por el propio Estado en cuanto a control del maltratador, centros de acogida, psicólogos a su disposición, quizás un mayor endurecimiento de las penas para los maltratadores y, en definitiva, de una dotación económica que haga del servicio que entiende en la materia un instrumento completamente eficaz.
Estos son los únicos caminos para erradicar la violencia de género, ésa que toda la sociedad condena de puertas afuera de su casa y que, a veces, de puertas a dentro silencia con los resultados que todo el mundo conoce.
En un día tan trascendente como el Día Internacional contra la Violencia de Género, reivindiquemos que los recortes que han llegado a tanto lugares no afecten a esta lucha fundamental para la vida y la dignidad.
La Voz de Medina y Comarca