Javier Solana.- El traslado de un complejo sistema de andamiaje a la iglesia de Santa María Magdalena de Matapozuelos, en la mañana del jueves, arroja una cierta luz sobre las obras de rehabilitación a acometer en dicho inmueble sacro.Tras el jarro de agua fría que supuso la pasada semana la votación en las Cortes Regionales de Castilla y León, en la que el Partido Popular se negó a aprobar la rehabilitación integral de dicho inmueble religioso, contradiciendo así las palabras de su portavoz, Raúl de la Hoz, que aseguraba que el inicio de los trabajos en los aleros y cubierta del edificio eran inminentes, ayer comenzaron a instalarse los andamios que harán posible el inicio de la rehabilitación.
El presupuesto inicial con que cuenta la iglesia de Santa María Magdalena para el “Proyecto de Restauración de Cubiertas, primera fase”, que incluye las obras de rehabilitación total del alero e impermeabilización de la zona de encuentro entre el faldón de la cubierta y las bandejas de cobre que harán desaparecer cualquier riesgo de filtración de agua, así como otro conjunto de obras complementarias, asciende a 37.153,50 euros, de los cuales 16.938,82 euros irán destinados al pago del alquiler del andamiaje.
Eso sí, todo apunta a que las obras que van a acometerse serán financiadas por la propiedad de la iglesia, el Arzobispado vallisoletano, bien de forma directa o a través de la Junta Parroquial, ya que en la actualidad este semanario no tiene constancia de la firma de ningún convenio entre la Junta de Castilla y León, el Arzobispado, la Fundación de Patrimonio y el Ayuntamiento para la rehabilitación integral, por fases, del inmueble sacro.
Por tanto, el portavoz del PP en las Cortes de Castilla y León no pudo referirse a esta pequeña obra, en cuya financiación no participa la Administración Regional, a la hora de anunciar que se iniciarían en breve trabajos de rehabilitación de alero y cubiertas en la iglesia de Santa María Magdalena, a pesar del voto en contra del PP para la propuesta socialista de restauración integral del templo.
De ello se deduce que, tras la visita que realizaron en invierno a la iglesia parroquial los técnicos del Arzobispado vallisoletano y de la Junta para estudiar el estado del inmueble religioso, la Junta de Castilla y León y la Administración Eclesiástica Provincial han llegado ya a aun acuerdo para acometer por fases y de forma inmediata alguna obra más de la que ahora se anuncia. Y es que de no ser así parecería ilógico realizar una inversión más de 16.000 euros en el alquiler del andamiaje para acometer un presupuesto de ejecución material de 20.194,82 euros.
Por otra parte, el Ayuntamiento de Matapozuelos aprobó en sus Presupuestos Generales para el presente año una partida de 18.000 euros, condicionando su aplicación, mediante un escrito razonado, al inicio de las obras de rehabilitación integral de la iglesia, por lo que dicha cantidad no parece aplicable a las obras que ahora se anuncian, sino a otras de mayor calado y que no sean de mero mantenimiento del inmueble -que siempre debe correr a cuenta de la propiedad- posiblemente a las que aludió en las Cortes de Castilla y León el portavoz popular Raúl de la Hoz, a pesar de la negativa de su grupo político a aprobar la rehabilitación integral de este inmueble sacro y Bien de Interés Cultural, único abierto al culto en Matapozuelos.
Arzobispado: “en el nombre del proyecto está la clave”
Fuentes del Servicio de Obras del Arzobispado valisoletano aseguraron que “en el nombre de la obra que ahora se inicia está la clave” . Y es que el proyecto de la misma, redactado por Javier Carbayo Baz, se denomina “Primera fase de restauración de cubierta de la iglesia de Santa María Magdalena”.
Las mismas fuentes eclesiásticas aseguraron que la Junta de Castilla y León “se ha comprometido”, en el transcurso de varias reuniones, a realizar inversiones de “mayor calado”, en función de sus disponibilidades económicas, que bien podrían ser, a tenor de la liquidez del momento, con cargo a los Presupuestos Generales o a través de la partidas de “Gastos desconcentrados” de las que disponen algunas Consejerías.
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