Plaza Mayor
Han transcurrido al menos 16 años desde las últimas obras que se acometieron en la zona central y soportales de la Plaza Mayor; y al menos 27 desde que se remodelara su zona institucional, ese espacio casi triangular en el que se erigen el Palacio Testamentario, la “Casa del Arco”, el Ayuntamiento y la Colegiata de San Antolín.
Y todo porque cuando alguien ha tenido la valentía de remodelar el ágora principal de la “Villa de las Ferias”, no ha faltado quién, y siempre ha sido el mismo, con presencia en el Ayuntamiento durante 31 años, el que envenenase y politizase el tema para expulsar del poder al Grupo de Gobierno que puso en marcha las obras.
Pese a todo, la alcaldesa de Medina del Campo, y el Grupo de Gobierno que la sustenta, se lanza ahora a remodelar la zona institucional de la Plaza Mayor, al entender que la misma, por su deterioro, no puede soportar más el paso del tiempo; ni Medina debe devolver, como ha sucedido en otras ocasiones, los dineros finalistas que, procedentes de subvenciones, ya tiene en caja y que hay que invertir para intentar generar empleo.
La obra prevista se desarrollará además, con acierto, en el plazo récord de cuatro meses y sin molestias para los ciudadanos. Y es que ahora no se trata de remodelar toda la Plaza Mayor, con lo que los juegos de los niños y la normal actividad de la misma no se verán afectados, por lo que el político que siempre utilizó tal tema para desgaste de sus adversarios se ha quedado sin argumentos, porque no los hay para incordiar, y carece además de cualquier tipo de predicamento por las obras que ejecutó cuando ocupaba la poltrona principal del número 1 de la Plaza Mayor, además de otras razones sobradamente conocidas por la ciudadanía.
Al margen de divagaciones, lo importante es que la zona institucional de la Plaza, deteriorada durante 26 años, y casi sin un mal bacheo que recompusiese su aspecto, va a remodelarse para ofrecer, al visitante, una mejor imagen de Medina; a los medinenses, un espacio por donde caminar sin tropezar; y a la estética de la localidad, un nuevo aire que la villa lucirá con motivo de la Feria Renacentista de mediados de agosto, fecha prevista para la recepción de unas obras que ya no podían esperar más, porque los propios ciudadanos las demandan.
La Voz de Medina y Comarca