Editorial

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Luces navideñas
Poco a poco se han instalado las luces de Navidad en las calles de Medina del Campo. Parece ser que la asociación empresarial “Círculo de Progreso”, con el apoyo de los comerciantes, en función de la necesidad que impone la crisis, ha optado por repetir formato y, cuando ha tenido ocasión, ha sustituido el mismo, basado en muchos casos en viejas luminarias, por bombillas de bajo consumo.
De esta forma, de manera especial, en lo que a la Plaza Mayor se refiere, vuelven a instalarse en el centro aquellas luces que, en otras épocas, formaron parte de las denominadas Navidades Blancas.
El hecho es loable, pero debería ser, como casa de todos que es, el Ayuntamiento quien se encargase, como siempre hizo, de la iluminación, y no limitarse a ser un mero colaborador, cuya labor, sin duda alguna y nadie lo olvide, será la de pagar la factura de Iberdrola, puesto que las luces están enganchadas a los sistemas de alumbrado público.
Medina, de esta forma, ya está preparada para la Navidad al igual que muchas otras ciudades y parece haberse sujetado el cinturón en lo que a gasto se refiere, procediendo al encendido del alumbrado navideño el pasado fin de semana.
Pero sistema de alumbrado al margen, lo más importante es que el mismo llega un año más y se enciende para vivir una serie de celebraciones profundamente arraigadas en la idiosincrasia de los medinenses, como no podía ser de otra manera, tanto por el carácter simbólico que dichas celebraciones tienen, como por el carácter de comercialidad siempre presente en la forma de pensar de los ciudadanos de esta villa comercial.
Con la iluminación llega a ciencia cierta un realce de las calles, a la par que una mayor seguridad para las mismas, en unas épocas en las que, posiblemente, el Ayuntamiento se vea abocado, no tardando mucho, a reducir la factura de la luz, apagando alguna de las farolas existentes o recurriendo a nuevas inversiones para utilizar luminarias de bajo consumo. Y es que estamos en crisis y Medina no se puede permitir las frivolidades de algunas ciudades, caso concreto de Madrid, para evitar que la factura de deudas se incremente.
Pese a todo, con más o menos luces, la oferta navideña de Medina ya está ahí; su comercio está preparado para recibir a quien decida acercarse al mismo; y los mejores deseos de prosperidad están en la mente de todos; aunque tal y como confesaban los medinenses a través de la encuesta de este semanario, este año tendrán menos recursos destinados a la Navidad.
Por ello no está de más agradecer la sensatez que, en esta ocasión, ha tenido Círculo de Progreso en la instalación de las luces.
LA VOZ DE MEDINA Y COMARCA